sábado, 28 de marzo de 2020

Notas para Mati






En tiempos de COVID-19 Mati ha iniciado a soltar sílabas. Sus frutas favoritas son las de sabor ácido y  se lleva bien con los lácteos. Pero su verdadero amor está en las hojuelas del Honey Bunches. Intento recordar qué alimento estaba en mi top de niño y solo me llegan vagos pasajes con pan bañado en chocolate, mazapán de la Rosa y extravagancias que incluyen chamoy y chiles enlatados. Mati en su descubrimiento del lenguaje fija la mirada exactamente en la boca de las personas, sabe que ahí está el secreto. Por las noches, no siempre, leo un cuento en voz alta y lo descubro mirándome, le encanta el sonido: el-ave-vuela, la-noche-canta, los-faroles-iluminan. Cuando buscaba algún tipo de música para las noches (típica búsqueda: música para dormir bebes) en algún momento, en algún lugar, me topé con una canción: “Two Fish and Elephant” y fue definitivo. Desde ahí Mati y yo somos fans de Khruangbin al punto de tener discusiones nocturnas tipo Mati es hora de dormir no bailes con Khruangbin. Es la música que escuchamos antes de dormir, a veces nos quedamos mirando el techo sin decir palabras hasta que uno de los dos pierde y cierra los ojos primero. Es tan bella, relajante, dolce no dulce, tan no sé qué, que pierdo casi siempre cerrando los ojos. 

  

   







No hay comentarios.:

Publicar un comentario